El Consejo Europeo adoptó el 30 de mayo una Directiva que promueve la reparación de bienes rotos o defectuosos, también conocida como «Directiva sobre el Derecho a Reparar». En este informe se plantea que los consumidores tienden a sustituir sus productos una vez estos se vuelven defectuosos. Es decir, prefieren un cambio completo antes que repararlo o reutilizarlo. Estas rutinas de consumo son muy perjudiciales para el medioambiente, la eliminación prematura de los bienes reparables da lugar a un aumento de residuos. Genera a su vez una mayor emisión de gases de efecto invernadero y una mayor demanda de recursos valiosos para la producción de nuevos bienes. Por ello, desde la Unión Europea se busca promover el consumo sostenible a través de la reparación y la reutilización.
Por un lado, en la fase de producción se habla de generar productos con un diseño sostenible que facilite su reparación o reutilización. Por otro lado, la fase de consumo se centra en el empoderamiento de los compradores con información sobre la durabilidad y reparación de los bienes en el punto de venta.
En su estudio de impacto se ha demostrado que gran parte de los consumidores recurre a la sustitución completa del producto una vez este se ha estropeado, ya que no disponen de la información o los recursos necesarios para repararlo.
Algunas medidas para paliar esta situación son:
- Crear una plataforma a escala nacional que ponga en contacto a los consumidores con reparadores y promueva los bienes reacondicionados.
- Los usuarios de productos conectados tendrán acceso a los datos que generen durante su uso.
- Existen medidas correctoras contra los vendedores ante los posibles vicios que pudiera haber en el momento de venta del producto y que se manifiesten en un periodo de responsabilidad de mínimo dos años.
- Se obligará a los reparadores a que presenten de manera previa un presupuesto que incluya el precio y las condiciones de reparación.
- Se obligará a los productores de bienes a los que se aplica la normativa europea, que reparen el producto fuera de la garantía legal a cambio de una contraprestación de dinero.
Hasta el momento la mayoría de Estados miembro de la UE no se han pronunciado sobre las medidas esbozadas. Por la parte de los que sí se ha pronunciado, la mayoría de ellos consideran que la imposición de reparación hacía los operadores económicos es excesiva.
Enlace a la investigación: https://www.consilium.europa.eu/es/press/press-releases/2024/05/30/circular-economy-council-gives-final-approval-to-right-to-repair-directive/