Minerales críticos en la transición a energías limpias

La Agencia Internacional de Energía (IEA) ha presentado un nuevo informe acerca de los minerales críticos -los llamados minerales críticos son el cobalto, litio, cobre y níquel-. Desde la institución aseguran que se ha producido un aumento del consumo y la demanda de este tipo de materiales. Esto se debe a que son componentes esenciales para muchas de las tecnologías de energía limpia que se promueven actualmente.

Las plantas solares fotovoltaicas, los parques eólicos y los vehículos eléctricos generalmente requieren más minerales críticos para su construcción que sus contrapartes basadas en combustibles fósiles. Un coche eléctrico típico necesita seis veces más aportes minerales que un coche convencional y una planta eólica marina consume 13 veces más recursos minerales que una planta de gas de tamaño similar. El litio, el níquel, el cobalto, el manganeso y el grafito son cruciales para el rendimiento de las baterías. Las tierras raras esenciales para los imanes permanentes utilizados en turbinas eólicas y motores de vehículos eléctricos. Las redes eléctricas necesitan una enorme cantidad de aluminio y cobre.

La AIE presta mucha atención a la cuestión de los minerales críticos y su papel en las transiciones energéticas. En julio de 2023, la Agencia publicó su revisión inaugural del mercado de minerales críticos, cuyo objetivo es proporcionar una comprensión clara de la dinámica actual de la oferta y la demanda y lo que significan para el futuro. También organizó la primera cumbre internacional sobre minerales críticos y su papel en las transiciones a energías limpias el 28 de septiembre de 2023 en París. El evento fomentó el diálogo entre una amplia gama de partes interesadas globales, incluidos ministros de gobierno, líderes de la industria, inversores y miembros de la sociedad civil.

Los países tienen que continuar con sus esfuerzos para reducir las emisiones, pero lo deben hacer a través de materiales y sistemas energéticos que sean seguros y resilientes. Para ello, los responsables de las políticas energéticas necesitan ampliar sus horizontes y tener en cuenta las nuevas vulnerabilidades ambientales. Cuestiones como la volatilidad de los precios, la seguridad del suministro y las arenas movedizas de la geopolítica no desaparecen tampoco en un sistema energético electrificado y rico en energías renovables.

Resultados Clave

De 2017 a 2022, se triplicó la demanda general de litio, un aumento del 70% en la demanda de cobalto y un aumento del 40% en la demanda de níquel.

La inversión en el desarrollo de minerales críticos aumentó un 20% en 2021 y un 30% en 2022. Entre los diferentes minerales, el litio experimentó el mayor aumento de la inversión, con un salto del 50%, seguido del cobre y el níquel. Las empresas con sede en China casi duplicaron su gasto en inversión en 2022.